En julio de 1987 Los Helechos abre sus puertas con 28 habitaciones. Un empresario sanluqueño junto a su familia apuesta por aumentar la escasa oferta hotelera que por aquel entonces tenía la ciudad adquiriendo una casa señorial ya en desuso. Su privilegiada situación en pleno centro de la ciudad, a los pies del casco histórico y a pocos metros de la playa y su singular estética ya lo convirtieron desde muy pronto en uno de esos "hoteles con encanto" de visita obligada. De hecho, son muchos los visitantes que a diario se pasan para disfrutar de nuestros patios.

Esas primeras 28 habitaciones estaban situadas —algunas de ellas, aunque renovadas, aún se mantienen como las originales por tamaño y ubicación— en las mismas dependencias de la casa señorial en lo que pudieron haber sido las habitaciones de los dueños, la familia y el servicio y en torno al patio principal. Hablamos del patio de entrada, sin duda alguna la estancia con mayor valor histórico de nuestras instalaciones, y de la primera planta construída en torno a él. Pero antes de seguir adentrándonos en el hotel, no debemos pasar por alto el detalle de la fachada principal grabada en piedra, la puerta original de caoba cubana y nuestra famosa cancela de entrada forjada a mano, también original de la antigua casa palacio.

Volviendo al interior y después de unos pocos años funcionando con estas 28 habitaciones, nos encontramos con la zona más nueva del hotel, el resto de las habitaciones hasta alcanzar las actuales y que se construyeron sobre lo que fueron los jardines de la antigua casa. Con la intención de mantener esa estética tan singular de este tipo de construcciones, la ampliación se estructuró en torno a lo que todo el mundo llama "el patio de la fuente": Un patio a modo de claustro rodeado de columnas con una galería interior, salpicado de macetas tanto en el suelo como en sus paredes y rematado en su centro por una fuente ornamental.

Después de acometer semejante ampliación y ante la imposibilidad de seguir ampliando nuestras instalaciones por falta de espacio, nuestro deseo ha sido siempre —y sigue siendo— el de ir renovando nuestros servicios (habitaciones, ascensor, piscina, solarium, cafetería, comedor para grupos, sala de reuniones, aparcamiento...) pensando siempre en que nuestros clientes se encuentren como en su propia casa.

Bienvenidos.